¿Conoces la meditación activa?

Seguramente has escuchado la importancia que tiene la meditación para equilibrar tus emociones, liberar el estrés, entre otros beneficios. 

Sin embargo, quizás no hayas escuchado el término de meditaciones activas. Este concepto lo introdujo uno de los maestros más conocidos del siglo XX, Osho. Consciente de que el mundo es muy diferente ahora, creó una serie de técnicas que consisten en prestar atención a las sensaciones del cuerpo a través de diferentes actividades.

Para Osho, meditar también significaba el gozo de estar a solas con uno mismo.  Y por ello, decía que antes de entrar en silencio mental, era indispensable limpiar las tensiones y las cargas emocionales negativas a través del movimiento del cuerpo. Estas son tres formas de meditar activamente:

 

- Caminar: Sin rumbo ni propósito. Respirar y caminar por un lugar tranquilo lleno de vida proporciona grandes dosis de bienestar. No te pongas metas, no contabilices cuánto dura tu caminata, no pienses en un punto de llegada particular, simplemente sintonízate con tu respiración y observa lo que pasa en tu interior sin juicios, a medida que avanzas. 

- Bailar: Es una forma de expresión y catarsis maravillosa. Si decides meditar bailando te recomiendo que pongas música instrumental, alguna que te guste y te permita cerrar tus ojos para dejar fluir el cuerpo. Déjate llevar por el ritmo, sin estar pensando si lo haces bien o mal, permítele a todo tu ser moverse con libertad.  

- Tejer, pintar, jardinear: Estas tres actividades son perfectas para meditar, depende de con cual resuenes. Recuerda que meditar consiste en estar completamente en el presente, observando todo lo que ocurre tanto fuera como dentro de ti, sin racionalizar o juzgar nada. La idea es relajarse, conectarse con el corazón y sentir el gozo de estar vivo.